La contracción del déficit
fiscal primario parece ser en estos tiempos la variable que mejor maneja el
Gobierno. Según informó ayer Nicolás Dujovne, por sexto trimestre consecutivo,
la Argentina cumplió sus metas fiscales, con lo cual garantizó que el país
llegará al equilibrio de las cuentas públicas este año. Dujovne resaltó: "el
compromiso con el cumplimiento de esas metas es irrenunciable. No hay ninguna
chance de que la Argentina incumpla con esas metas, que es la única manera de
tener una económica sólida". Según datos oficiales, el resultado fiscal
primario del primer semestre del año arrojó un déficit de 0,8 puntos del PBI y
sobrecumplió la meta del semestre, que era de 1,1%. "En el segundo
trimestre de 2018 hemos logrado un sobrecumplimiento del 0,2% de la meta
fiscal, con vistas a lograr un déficit de 2,7% este año y del 1,3% en
2019", dijo el ministro de Hacienda y Finanzas.
El déficit primario del primer semestre se ubicó en $105.825 millones, menor a
los 148 mil millones que había como meta, y significó un ahorro 25.364 millones
de pesos, equivalentes al 0,2% del PBI. En conferencia de prensa, el ministro
aseguró que "de aquí a fin de año, vamos a mantener la brecha de 7 puntos
entre el ritmo de crecimiento de los ingresos y el ritmo de crecimiento de los
gastos, y eso nos va a permitir alcanzar la meta del 2,7%" de déficit. A
su criterio, "la baja del déficit va de la mano de la baja del gasto. En
el primer semestre, el gasto real fue 5,6% más bajo que en el primer semestre
de 2017".
Según el ministro, "hemos vuelto a los niveles de gasto del primer
semestre de 2013. Durante la gestión anterior, el gasto prácticamente se
duplicó. Por eso, cada año que vamos progresando, vamos hacia niveles de gasto
anteriores, en los cuales podemos empezar a funcionar mejor como sociedad".
En ese sentido, dijo que "el gasto corriente, primario, ha vuelto al nivel
real de 2014", y afirmó: "tenemos que seguir bajándolo de manera
sostenida". Dujovne cuestionó el "incremento extravagante en el gasto
que se produjo entre 2010 y 2015", durante la gestión de Cristina Kirchner.
También, subrayó que a raíz de la baja del gasto, "necesitamos financiar
20 mil millones de dólares menos en los mercados, porque hemos acelerado el
ritmo de convergencia al equilibrio, y eso libera recursos para el sector
privado, que ahora tiene mucho más crédito que antes". Hacienda detalló
que el resultado financiero -el déficit primario más los intereses de la deuda-
reflejó en el primer semestre una baja del 1,7% interanual, para terminar la
primera mitad del año con un déficit de 1,9% del PBI. Esa baja se explica por
un aumento de los ingresos, que crecieron un 26,3% interanual, mientras que el
gasto creció 19,3%.
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