Por Ignacio Ostera
- La meta de déficit cero prevista para este año podría alcanzarse con el
aporte de las retenciones, pero la mirada de los economistas está puesta en el
2020, cuando el Gobierno deberá llegar a un superávit primario equivalente al
1% delPBI. Los expertos plantean que los derechos de
exportación no tendrán el salto que experimentarán durante el 2019, por lo que
el Gobierno deberá aplicar un ajuste durísimo sobre las cuentas públicas, ya
sea en el gasto en infraestructura o incluso plantear la necesidad de otra
reforma previsional.
Si bien hay dudas respecto a si efectivamente se logrará un resultado
equilibrado por posibles sobreestimaciones en los ingresos o minimizar el
impacto de la recesión sobre los recursos, las consultoras pronostican que este
año el déficit probablemente se acerque al objetivo acordado con el Fondo Monetario Internacional, que
podría desembolsar igual los montos acordados en el Memorándum de
entendimiento.
Por eso, para algunos analistas el verdadero problema estará a partir de
2020, cuando el Ejecutivo deberá mostrar un rojo fiscal antes de intereses de
$222.700 millones. Todo un desafío si se tiene en cuenta que la presión
tributaria será récord en 2019 y ya se jugó la carta de reimplementar las
retenciones que van de $3 a $4 por dólar y que, por ende, se licúan en caso de
una devaluación.
"El resultado de 2020 es un desafío aún mayor, porque no va a haber
mucho margen para ajustar el gasto no social", advirtió el consultor
Federico Muñoz. Es que estas partidas se llevan el 70% del Presupuesto y están
indexadas por inflación pasada y salarios. "Va a haber una necesidad
imperiosa de una reforma previsional, de otra manera será muy difícil de
alcanzar, salvo que sea con inversión nula", añadió el economista.
De todas formas, Muñoz consideró que con una iniciativa así se obtiene
una ganancia fiscal "en el tiempo" y no inmediata, ya que por lo
general consiste en extender la edad para retirarse.
Para el investigador de la UBA Ariel Coremberg, "todo dependerá de
las exportaciones", que jugarán "muy a favor" en 2019, en el
marco del rebote del 30% que se espera en la producción agrícola.
En ese sentido, el Presupuesto contempla un incremento de 172% en lo
recaudado vía retenciones, por un total de $440.000 millones, ante la mejora de
la cosecha y del precio recibido por los productores ante el salto de 100%
interanual en el tipo de cambio, que representa un ingreso adicional por 1,1%
del PBI.
"Sobre el 2020 hay serias dudas. Es una gran incógnita. No va a
haber boom de precios internacionales", acotó el profesor de la facultad
de Económicas, para quien una reforma previsional dependerá de "cómo
gane" el próximo presidente, que necesitará el respaldo del Congreso para sancionarla.
"Las retenciones no tendrían un empuje ulterior en 2020",
explicó Muñoz, aunque no descartó que una eventual recuperación económica
colabore en un mayor nivel de ingresos tributarios, lo cual ayudará a llegar a
la meta.
En tanto, Javier Alvaredo de la consultora ACM señaló que "si el
2019 es complicado, el 2020 es complicadísimo". "Es muy difícil
prever cómo se va a poder lograr, porque no vas a tener el instrumento de las
retenciones, que empiezan a tener rendimientos decrecientes", puntualizó
en declaraciones a la radio 990.
"El Gobierno va a tener que ajustar un punto del producto sobre el
30% del gasto que no está indexado, es una cifra terrible", recordó
Alvaredo, que también encendió las alarmas por "si este año se da el
efecto" observado en los derechos de exportación de la segunda mitad de
2018: se habían proyectado $150.000 millones pero entraron sólo $100.000
millones.
|