El Banco Central (BCRA) decidió reconocer el lenguaje inclusivo en cualquiera de sus modalidades como recurso válido para utilizar en sus comunicaciones, expedientes, formularios y documentación de la entidad. La nueva normativa forma parte de la “Guía del Banco Central de la República Argentina para una comunicación inclusiva”, aprobada por el directorio de la entidad que preside Miguel Ángel Pesce como “un compromiso institucional y un aporte para la construcción de una sociedad más justa”. La guía tiene ejemplos concretos, sugerencias y recomendaciones, ofrece opciones para nombrar colectivos y grupos, para expresar cargos y posiciones, ejemplos sobre el uso de artículos y pronombres, formas impersonales, y recomendaciones sobre el uso de imágenes. “La gestión del BCRA, en consonancia con el gobierno nacional, ha asignado relevancia a la política de género y respeto hacia la diversidad. El primer paso fue la creación de una gerencia específica en la materia [en el organigrama de la entidad monetaria]. Con ese mismo objetivo, el directorio ha aprobado la guía para una comunicación inclusiva, incorporando una herramienta eficaz, que nos permite adoptar en los textos un lenguaje inclusivo, acorde con el plexo normativo nacional e internacional vigente”, expresó Betina Stein, directora del banco, en un comunicado. “Con la aprobación de esta guía estaremos en una posición de avanzada en la materia. Es una herramienta excelente que nos va a ayudar a ser personas más inclusivas, más humanas, más respetuosas, más iguales”, reflexionó Claudia Berger, vicesuperintendenta de entidades financieras y cambiarias del Central. Con la nueva resolución, informó el BCRA, se busca “promover una comunicación que evite sesgos de género y expresiones sexistas, que no reproduzca estereotipos o situaciones de discriminación y que visibilice todas las identidades de género”. Asimismo, explicó que el objetivo será “paulatinamente migrar de la masculinización del lenguaje a la interpelación de todos los géneros”. “La incorporación del lenguaje inclusivo es una pedagogía feminista de reconocimiento que impacta en la hegemonía del lenguaje sexista constructor de segregaciones, jerarquías y violencias. Con esta política estamos generando ámbitos de trabajo más igualitarios y previniendo violencias, especialmente, la vulneración del derecho a la identidad de género”, afirmó María Celeste Perosino, gerenta de Promoción de Políticas de Género, Resguardo del Respeto y Convivencia Laboral. Convenio con el Nación Por otra parte, mediante un convenio con la Asociación Bancaria, el Banco Nación se comprometió a cubrir al menos el 1% de su planta de empleados con personas travestis, transexuales y transgénero. El acuerdo contempla que se deberán incorporar escalonadamente personas de la comunidad trans en los próximos meses, durante los procesos normales de selección de personal. Según el acta firmada, el 5% del total de ingresantes por semestre deberá ser cubierto por esas comunidades, “siempre que [los aspirantes] reúnan los requisitos establecidos y sorteen el proceso de ingreso de personal al banco”. La iniciativa está orientada a darles más visibilidad y apoyo a las personas trans, que según el Inadi encabezan las denuncias por discriminación. “Las identidades trans en nuestra sociedad históricamente han sufrido la vulneración de sus derechos humanos fundamentales, siéndoles vedado el acceso a derechos básicos, como a la igualdad y la no discriminación, al trabajo, a la seguridad física, a la seguridad social, a la privacidad, a la salud integral, a una adecuada calidad de vida y a la dignidad personal, que lleva a las personas a una verdadera ‘muerte civil”, dice el acta firmada por el presidente del Nación, Eduardo Hecker, y el titular del gremio, Sergio Palazzo. El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, encabezó la firma del acuerdo y manifestó su apoyo al proyecto de ley integral trans que por estas semanas redacta un sector del oficialismo. “Nosotros no hacemos política de cupo, hacemos política de ampliación de derechos”, dijo Cafiero. |