Por Yohay Elam - "Compre el rumor, venda el hecho": los planes económicos del presidente electo Joe Biden fueron desvelados por la prensa mucho antes de su discurso y los mercados ya los habían tenido en cuenta. Los inversores ya habían aplaudido las perspectivas del paquete de estímulo de 1,9 billones de dólares antes de que comenzara a hablar, y luego se retiraron cuando no pudo completarlo. Sin embargo, la imagen podría volver a cambiar. 1) Repensar el discurso de Biden El ánimo también se agrió cuando Biden dijo que "todos deben pagar su parte justa", insinuando aumentos de impuestos. La caída de las acciones envió a los operadores al dólar estadounidense como refugio seguro. Esta fuga hacia el dólar pareció haber disminuido cuando los rendimientos de la deuda estadounidense volvieron a dominar la moneda. El riesgo activado / desactivado está regresando. Otra preocupación es que los demócratas tendrán dificultades para aprobar todas las medidas, dada su escasa mayoría en ambas cámaras del Congreso, pero eso no es una novedad. En general, aparte de los posibles aumentos de impuestos, que pueden quedar archivados, hay poco que asuste a los inversores. El estado de ánimo del mercado puede mejorar una vez más. 2) Powell es poderoso Antes de que Biden subiera al escenario, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, aclaró que el banco está totalmente comprometido con la política acomodaticia. Parecía poner fin a las especulaciones sobre la reducción anticipada del plan de compra de bonos de la Fed. La promesa de imprimir dólares el tiempo que sea necesario, y de mantener las tasas en cero, solo golpeó temporalmente al dólar en medio del discurso de Biden. Los inversores pueden tener un replanteamiento de las palabras de Powell, lo que puso fin a las conversaciones de sus colegas. Powell es el jefe, después de todo. 3) Datos débiles de EE. UU. La economía de EE. UU. Necesita todo el estímulo que pueda recibir mientras lucha contra las consecuencias de la ola invernal del coronavirus, que se suma a la interrupción de varios programas gubernamentales. Las solicitudes de desempleo aumentaron a 965.000, mucho peor de lo esperado y el más alto desde el verano. Es poco probable que las publicaciones del viernes sean alegres. El informe de ventas minoristas de diciembre probablemente muestre un aumento año tras año en 2020, pero una temporada de compras navideñas moderada. La lectura inicial de la opinión del consumidor de la Universidad de Michigan también se reducirá. Estas publicaciones pueden presionar al dólar a la baja a medida que los inversores fijan tasas de interés más bajas durante más tiempo y flexibilización cuantitativa. ¿Qué pasa con el lado euro de la ecuación? Si bien las perspectivas de Europa dejan mucho que desear, el principal impulsor es el dólar. Francia adelantó su toque de queda nocturno a las 18:00 en la mayor parte del país donde Alemania está considerando endurecer sus restricciones y también las regiones de España. En Italia, el ex primer ministro Matteo Renzi desencadenó una crisis de coalición. No obstante, hay cierto margen de recuperación, procedente de la debilidad del dólar más que de la fortaleza del euro. |