Por Ruben Ramallo - Hay una realidad: los
gigantes tecnológicos de Wall Street se están desplomando. En los
últimos dos años, las cotizaciones de las acciones tecnológicas mostraron un
comportamiento más que atractivo, basado en que se trataba de un sector
"en crecimiento" que parecía no tener techo. Pero a partir
de noviembre del año pasado todo cambió y muchas de ellas
muestran caídas que para algunos analistas reflotan
la burbuja tecnológica del 2000.
Si bien se
podría interpretar que este fenómeno se circunscribe a Wall Street, la realidad
es diametralmente opuesta, a partir del momento en que
prácticamente todas ellas cotizan en la Bolsa de Buenos Aires bajo la forma de CEDEARs.
La profundidad de las caídas hace suponer que este tipo de papeles
habría entrado en una corrección de este ciclo de expansión, dando lugar a que
su evolución haya sido peor que la de las denominadas "acciones de
valor".
En lo que va del año, el mercado tecnológico estadounidense
muestra una caída del orden del 26%, un porcentaje que se eleva a
casi el 30% si se toma en cuenta el máximo alcanzado el 19 de noviembre pasado.
Como consecuencia de ello se estima que se volatilizaron más de siete billones
de dólares de las cuentas de los inversores de todo el mundo.
Si se toma en cuenta lo sucedido con las
denominadas FAANG, esto es el grupo de compañías integrado
por Facebook, Apple, Amazon, Netflix y Google, el
panorama es desolador, ya que las caídas de cada una de ellas son las
siguientes:
Facebook: -42%
Apple: -21%
Amazon: -34%
Netflix: -69%
Google: -24%
Pero lo peor del caso es que la debacle que se extiende a todo el
sector, también incluye a compañías de la dimensión de Microsoft, que retrocede
un 24% o las argentinas Globant y Mercado Libre, que pierden un 40 por ciento.
¿Por qué se hunden las acciones de empresas
tecnológicas?
Muchos son los
factores que están contribuyendo al desplome de las Big Tech en el mercado
ya
que abarcan la aversión al riesgo por el ciclo de alzas en las tasas de interés
en Estados iniciado por la FED, pasando por la invasión de Rusia a
Ucrania, la aparición de una nueva ola de Covid-19 y sobre todo los efectos
directos e indirectos de la inflación, que en los EE.UU. es la más alta de los
últimos 41 años.
Todos factores son los que siembran
de estrés, volatilidad y caídas a Wall Street, a
los que se suman los cada vez más poderosos algoritmos, por su capacidad de
generar reacciones en cadena ante una caída de los precios.
Obviamente estas caídas se reflejan en forma instantánea a nivel local
pues todas ellas cotizan bajo la forma de CEDEAR.
Lo curioso del caso es que las variaciones son prácticamente las mismas
que las registradas en Wall Street debido básicamente a que si bien operan en
pesos, el tipo de cambio que se toma como referencia es el Contado con
liquidación, que en lo que va del año prácticamente no muestra
variantes.
Inversores: ¿es momento de huir o apostar por
las tecnológicas?
Si bien en términos bursátiles se cumple a rajatabla el dicho que dice
que "lo hecho, hecho está", es
interesante tomar en cuenta cuáles son los pronósticos y precios objetivos que
surgen de diferentes encuestas entre analistas de Wall Street, que pueden
tomarse de referencia para los inversores locales.
Apple: si bien se ve afectada especialmente por la coyuntura general y
en especial por China, que afecta la producción del iPhone, su precio objetivo
medio es de algo más de 191 dólares, frente a los 138 actuales. Sobre un total
de 26 expertos, 21 optan por comprar y 5 por mantener el valor en
cartera.
Microsoft es otro de los valores con buenos resultados y
apreciación de crítica y público, es decir de analistas e inversores. Sobre 23
analistas consultados, 100% apuesta por la compra del valor. Con un precio
objetivo medio de 360 dólares, marca un presunto recorrido alcista para el
valor a 12 meses vista del 40%
Facebook: a partir de un buen resultado en el primer trimestre del año,
que superó lo registrado anteriormente, su margen potencial de crecimiento se eleva
hasta un 40% para los próximos 12 meses. Con 37 analistas consultado, 26
se vuelcan a comprar, 10 por mantener y uno por vender sus acciones en el
mercado.
Amazon: la fuerte caída registrada en el precio eleva su potencial de
compra, con un precio objetivo de u$s3.695, pero no termina de convencer a
los expertos, pese a que el anuncio del desdoblamiento de sus acciones en marzo
había entusiasmado al mercado.
Google: sus resultados también decepcionaron al mercado, sobre todo los
referidos a YouTube en durísima competencia con un TikTok que le está ganando
la partida. Aun así, el valor es ampliamente apoyado por los analistas, ya que
igual que con Microsoft, 30 de 30 ven un precio de u$s3.270 para los próximos
doce meses.
Netflix: una vez conocido su último balance, cambió la visión de los
analistas sobre su futuro, ya que en su mayoría consideran que el precio
objetivo anterior será muy difícil de cumplir hasta que la compañía vuelva a
encontrar su camino tras el éxito desmesurado de la pandemia, en particular en
lo que hace a mejorar los ingresos. Solo 7 de 39 analistas aconsejan su compra.
¿Qué son los CEDEAR y cómo funcionan?
Los Cedears (Certificados de Depósito Argentinos) son instrumentos de renta variable que
cotizan en la Bolsa de Buenos Aires.
Estos representan partes de las acciones más importantes
que cotizan en el exterior. Esta forma de inversión permite indirectamente dolarizarse, ya que los
activos que se adquieren están vinculados al tipo de cambio CCL.
Los Cedears le otorgan al propietario los mismos derechos que
las acciones, como poder acceder a la asamblea de accionistas y cobrar
dividendos.
Este tipo de activo funciona
de la siguiente manera: al comprar un Cedear, se accede a los
derechos de una "fracción de una acción". El tener uno de estos
certificados nos otorga todas las ventajas de una acción tradicional, por lo
que la posible ganancia se da cuando se venden las acciones y/o cuando se
reciben dividendos (aunque no todas las empresas reparten).
¿Cómo se cobran los dividendos?
Si el CEDEAR de la empresa que está en la cartera de inversiones paga
acreencias, los dividendos se acreditarán automáticamente en la cuenta en
dólares en el ALyC.
Luego el usuario podrá extraerlos hacia un CBU en dólares a su nombre, o
bien invertirlos en instrumentos en esa moneda.
Se debe tener en cuenta que los dividendos son una porción de las
ganancias de una determinada empresa que se reparten entre los accionistas. De
esta forma, cada compañía puede elegir pagarlos o reinvertirlos en sus negocios.
No hay un tiempo mínimo determinado para mantener un CEDEAR en el
portafolio. Estos se pueden comprar y vender en minutos, como también pueden
permanecer en poder del inversor por el plazo de tiempo que desee.
En cuanto al tratamiento
tributario de los CEDEARs, la compra/venta está exenta, pero su
rendimiento, tributa con una escala progresiva y a su vez, está grabado
por bienes personales.
No se debe perder de vista que son una herramienta de inversión de renta
variable y apuntan a posiciones de moderadas a agresivas. Es clave,
entonces, mantener una cartera equilibrada y la mente fría al momento
de planificar una operación. |