Tras esta, los títulos soberanos en dólares saltaron fuerte; resaltaron las ganancias del Bonar AL41 ( 2,9%) y del Global GD41 ( 2,6%), mientras que el AL30 y el GD30 treparon 1,7% y 1,1%, respectivamente. Así, el riesgo país cayó con fuerza hasta los 561 puntos básicos, su nivel más bajo desde el 9 de enero.
El economista Gustavo Ber destacó que además del buen desempeño de los títulos argentinos, "crece la expectativa por una renovada compresión hacia la región", algo que "motiva mayores apuestas sobre los títulos más largos (2035, 2038 y 2041) en busca de aprovechar su atributo de mayor duration".
El Gobierno abre paso a una etapa de remonetización
En cuanto a las modificaciones comunicadas por parte del BCRA, desde Aldazabal destacaron que el Gobierno comenzó una nueva fase en su programa monetario: la de remonetización.
En ese sentido, remarcaron que la prioridad de esta nueva fase será "alcanzar la convergencia de la inflación doméstica al nivel de inflación internacional", aunque también se señala que se buscará "compatibilizar el proceso de desinflación con la acumulación de reservas internacionales".
En su último informe, Cocos Research señaló que “el Banco Central decidió abandonar el tipo de cambio como ancla nominal y avanzar hacia un esquema de mayor flexibilidad, con bandas cambiarias que se ajustarán por inflación doméstica, en línea con lo que venían reclamando los mercados”.
La fintech remarcó que el nuevo programa de re-monetización abre una ventana para recomponer reservas internacionales sin necesidad de esterilización sostenida, siempre que acompañe la evolución de la demanda de dinero. Según detallaron, “el escenario base de re-monetización contempla un aumento de la base monetaria desde el 4,2% al 4,8% del PBI hacia diciembre de 2026, lo que podría ser abastecido con compras de hasta u$s10.000 millones sin necesidad de una esterilización sostenida”.
Además, señalaron que “el BCRA formaliza la intervención en medio de la banda, en un escenario donde las compras en el piso resultaban cada vez menos viables por ubicarse en niveles de tipo de cambio real incluso inferiores a los de la salida de la convertibilidad”, al tiempo que aclararon que la autoridad monetaria buscará preservar la estabilidad del mercado con una participación acotada.
Las acciones hicieron caso omiso al buen clima local y fueron arrastradas por el contexto global
A contramano, las acciones argentinas que cotizaron en Nueva York se dieron vuelta tras el mal humor en la plaza extranjera. Entre los ADRs, las mayores bajas fueron para Cresud (-4,3%), Telecom (-3,6%) y Transportadora de Gas del Sur (-3,1%).
A nivel local, el S&P Merval subió 0,7% a 3.034.429,24 puntos, aunque medido en moneda dura cayó 0,3%, en medio de la suba del dólar contado con liquidación (CCL).